Más de lo que fue nuestra Eucaristía de inicio de Año Escolar, un maravilloso encuentro con Jesús
juntos como Familia Salesiana. Al Dios de la vida le decimos: aquí estamos, con nuestras manos, con nuestro esfuerzo y trabajo dispuestos a dar lo mejor de cada uno para nuestros niños y jóvenes que nos son confiados.